Sala de Prensa

En el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres que se conmemora cada 25 de noviembre, el Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la mujer (ISDEMU) presentó un informe sobre el Estado y Situación de la violencia contra las Mujeres 2015.

Según datos que revela el informe entre enero y agosto de 2015, la Policía Nacional Civil (PNC) tiene registrados 597 casos de violación sexual, 165 de agresión sexual y 361 de estupro. En total hacen 1,123 denuncias. El departamento con más casos de delitos sexuales es La Unión (209), seguido de La Libertad (126), San Miguel (119) y Cabañas (114).

Hasta mayo de 2015 había 812 denuncias recibidas, y en 672 de esos casos, las víctimas fueron niñas y adolescentes hasta 17 años.

Para la secretaria de Inclusión Social, Vanda Pignato, la violación sexual representa un instrumento de dominación y de terror individual y colectivo que perpetúa la idea que el cuerpo de la mujer puede ser utilizado  y abusado por los hombres, lo cual es una realidad que urge cambiar.

Además agregó que es imperioso también cambiar la naturalidad con que la sociedad asume el fenómeno de los embarazos en adolescentes y  las uniones tempranas, ya que les trunca el futuro y desarrollo a las niñas y jóvenes.

De acuerdo con Alan González, representante de la FAO en El Salvador, la violencia contra la mujer es un atentado para el desarrollo social y económico del país.

“Se está viviendo en una sociedad tradicionalmente machista en toda la región de América Latina y el Caribe, aunado a temas educativos y otros, pues permiten que se desarrolle esta violencia contra las mujeres”, dijo  González.

En cuanto a los casos de feminicidios, según el Instituto de Medicina Legal, de enero a junio de este año, que consignan que en la mitad de 2015 han ocurrido 230 muertes violentas de mujeres entre 10 y 40 años. Además de acuerdo a los datos del Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe de la CEPAL, El Salvador ocupa el segundo lugar con la tasa más alta de feminicidios de la región.

“No podemos continuar dejando en libertad a los agresores, no podemos continuar sin hacer efectivas las medidas de protección a las mujeres, no podemos continuar dejando un país en la absoluta impunidad. Los pederastas, acosadores y violadores que se ocultan en estructuras sociales como las iglesias, empresas y el  Estado deben ser denunciados, procesados y sancionados efectivamente, dando justicia y reparación a las víctimas”, aseguró Pignato.

Entre los avances más significativos se mencionan: Implementación del  enriquecimiento curricular en Educación Integral de la Sexualidad con enfoque de Género y Derechos Humanos  en todos los niveles educativos; Fortalecimiento de las capacidades municipales para la elaboración e implementación de los Planes Municipales de Prevención de Violencia contra las Mujeres, con el esfuerzo coordinado del ISDEMU y el Ministerio de Justicia y Seguridad Pública, a través de la Dirección de PREPAZ.