Más de 7.000 personas que viven en Barrancones, Candelaria de la Rompisión y otras comunidades en el Departamento de La Unión están preparándose para gestionar los riesgos (sobre todo inundaciones) que existen en los lugares donde habitan y reducir así su vulnerabilidad ante los desastres.
El Salvador es uno de los países más vulnerables del mundo, de ahí la larga tradición de cooperación de Geólogos del Mundo (GM) en esta zona junto a la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). El próximo mes de junio se clausura una de las intervenciones con la que se cierra una etapa de más de seis años de trabajo con los municipios del oriente de El Salvador.
La Unidad Ecológica Salvadoreña y Ayuda en Acción elaboraron, de forma participativa con las comunidades en las que trabajan, el Plan Didáctico para la Gestión Estratégica de Riesgos en el marco del Convenio “Seguridad Alimentaria y Gestión Estratégica de Riesgos en El Salvador, Honduras, Guatemala y Nicaragua 2010-214” financiado por AECID. Dicho Plan fue socializado ayer en un evento al que asistieron numerosas personalidades de instituciones públicas salvadoreñas vinculadas a la Gestión de Riesgos, con la finalidad de que sirva como herramienta didáctica para su utilización en el ámbito nacional.
Diez países de América del Sur se reúnen durante tres días en San Salvador, de la mano de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), para desarrollar el Taller de Coordinadores del Cluster Salud. Promovido por las Naciones Unidas, y con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), este mecanismo pretende mejorar la coordinación en la respuesta internacional en caso de desastres.
Los organismos de la Naciones Unidas, varias ONG y el Gobierno de El Salvador lanzaron hoy un llamado de emergencia (flash appeal) de 13.125.999 dólares para aliviar durante los próximos seis meses las necesidades básicas de los damnificados por el huracán Ida.
La AECID ha contribuido a través de Protección Civil Salvadoreña, Cruz Roja Española y las ONGD españolas con casi 150 toneladas de alimentos y 24 toneladas de kits de higiene, cocina y abrigo. En total, 300.000 euros, en donde se incluye la ayuda a la Organización Panamericana de la Salud (OPS) para la compra de medicamentos, atención psicológica y recuperación de pozos.
